Amanecer de María Victoria Montemayor
El alba es de oro,
Apenas roce de alas en los párpados,
Asombro en la raíz de la pupila,
Transparencia.
Sientes por dentro
Un bullir de sílabas y números,
Un latir de sonidos y de nombres,
Feraces, susurrantes.
Eres un lugar feliz,
Un espacio pequeño, un cuenco sensitivo,
En el que las palabras juegan con el mundo
Y crean la realidad de cada instante.
Claridad dorada ahora,como el alba