Buñuel candidato a los Premios Goya
Ha coincidido el inicio de esta sección dedicada al mundo de la imagen, el cine y las series principalmente aunque no exclusivamente, con la proyección en la Casa de Aragón en Madrid organizada por las instituciones aragonesas, de las obras candidatas a los Premios Goya 2020. Como además hemos decidido nombrar a la sección con el titulo de la última película de Buñuel, ESE OSCURO OBJETO DEL DESEO, parece que los hados de la Caverna de Sócrates nos estuvieran pidiendo que empezáramos hablando de estas obras que además pueden acabar representando a España en los Oscar 2020.

La presentación por la mañana en La Casa de Aragón se completó por la tarde con su proyección en el Pequeño Cine Estudio de Madrid. De todas ellas la más interesante con diferencia, que además nos ha parecido una magnífica película que puede acabar representando a España en los Oscar si no fuera por el inconveniente para algunos de ser una obra de animación, ha sido Buñuel en el Laberinto de las Tortugas, cuya crítica podéis leer a continuación.
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Buñuel en el laberinto de las tortugas (2019)
Salvador Simó Busom

Estamos ante una película de animación cuyo argumento gira en torno al rodaje en Extremadura del documental Las Hurdes, tierra sin pan en 1933, a cargo del maestro aragonés Luis Buñuel. Su director Salvador Simó Busom cuenta con una dilatada experiencia desde el año 2000 en el cine de animación, tanto en la realización de cortos como series de televisión, siendo éste el tercer largometraje que dirige aunque es el primero en el que interviene en la elaboración del guión. Se basa en el cómic homónimo de Fermín Solís y ha contado con el apoyo de los productores de El bosque animado (2001) y de Arrugas (2011), lo que es todo un aval de garantía de calidad, a pesar de haberse realizado con un presupuesto muy ajustado por expreso deseo de su director, inferior a los 2 millones de euros. El dibujo es magnífico y pertenece a lo que se ha dado en llamar la Línea Clara realizado en 2D con un cuidado diseño del color.
La acogida de la crítica no ha podido ser más favorable, pues ha ganado los premios a mejor director y mejor productor en el foro Cartoon Tribute, el más importante del sector en Europa, el Premio Especial del Jurado en el Festical de Animación de Los Ángeles y el premio HBO de largometraje iberoamericano en el Festival de Miami, entre otros.
Con una duración de apenas 80 minutos, la acción se desarrolla con un ritmo admirable que no decae en ningún instante, acompañada de forma extraordinaria por la música de Arturo Cardelús que subraya y anima suavemente los hechos que vamos observando y nos va presentando poco a poco a los protagonistas de ésta historia que no deja de sorprendernos en ningún momento, pese a ser en líneas generales bastante conocida. Desde sus primeros años en Calanda, pasando por las vicisitudes del joven Buñuel en París y sus diferencias con Dalí, hasta llegar al núcleo central de la historia, su encuentro en Huesca con el escultor y amigo Ramon Acín, que con el avance de la trama se va convirtiendo poco a poco en el coprotagonista de la historia, para terminar con el rodaje del documental en Las Hurdes. Dejando caer de vez en cuando algún episodio surrealista que enriquece la narración y a la vez siendo de una honestidad incuestionable contando el día a día del rodaje de la tercera película de Buñuel, demostrando un cuidadoso trabajo de documentación e investigación, sin dejar de ofrecer algunos momentos por duros que sean para el espectador, pero que al final humanizan al personaje y dotan a la obra de una riqueza que habría gustado al maestro aragonés.
En uno de los momentos claves, cuando Buñuel va a ver a su amigo el escultor Ramón Acín para pedirle ayuda para rodar su siguiente película, éste le dice que le resulta imposible ayudarle salvo que les toque la lotería… para lo que efectivamente, saca un número que resulta premiado y les permite hacer la obra. Cuenta sin embargo la leyenda urbana, que esta fue la explicación oficial que se dio, pero que en realidad el dinero procedía de una acción contra alguna entidad bancaria, bastante frecuente entre las organizaciones obreras de la época en aquella España de extremadas pobrezas y riquezas de principios del siglo veinte. Como diría el maestro John Ford, entre la realidad y la leyenda, el artista siempre debe elegir la segunda, como muy bien ha hecho su director.
El film se estrenará el 26 de abril, el mismo día que se estrenó Las Hurdes, tierra sin pan en 1933 en Madrid. La película dedicada a Buñuel pero también a ésa gran persona que fue el escultor Ramón Acín, nos ofrece una pequeña joya plena de sensibilidad y buen cine que ningún buen aficionado debería dejar escapar. (9/10)

Otra de las obras presentadas es el documental Salvar al Bucardo de Pablo Lázaro de 70 minutos de duración. El planteamiento es altamente interesante, pues relata la experiencia única en el mundo según nos contó su director, de recuperar mediante ingeniería genética a un animal desaparecido como era el Bucardo, una especie de cabra pirenaica cuyos últimos ejemplares se refugiaron en el Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido y que desapareció definitivamente en el año 2000. Evidentemente no es una obra para todos los públicos, va dirigida a aquellos que estén interesados en este tema tan específico que se verán gratificados por la historia que cuenta.
También pudimos ver Aute Retrato, un documental de Gaizka Urresti de una duración tipo largometraje de 98 minutos, lo que no es habitual en este tipo de formato más próximo a la hora muchas veces escasa. Se acerca al personaje del cantautor Luis Eduardo Aute repasando su vida y amplia obra que no se ciñe sólo a la música sino que abarca el dibujo, la pintura y la poesía. Se nota el oficio de su director que maneja con habilidad el ritmo narrativo y que quiere trasladar la emoción, a veces excesivamente, y la cercanía que siente por el personaje.
Finalmente se pudo ver OJOS NEGROS, cuyos directores Iván Alarcón, Ivet Castelo, Marta Lallana y Sandra García narran la historia de una joven de 14 años, Paula, que tiene que pasar el verano en el pueblo turolense de Ojos Negros con su tía y su abuela enferma. La experiencia vivida ésos meses significará su comprensión sobre lo que supone la madurez de la vida y hacerse mayor. La película es la primera obra de sus directores y esto se nota en su desarrollo agravado aun más por el hecho de que al ser una dirección entre cuatro personas se echa en falta una enfoque que unifique el desarrollo del film. No obstante es un trabajo meritorio a cuyos directores habrá que seguir en el futuro.
© Chusé Inazio Felices
Fotografías del autor.